ana-dago-imfarmacias-paciente-oncologico

“El primer problema que se encuentra el farmacéutico en el abordaje integral de estos pacientes es la falta de información”

Ana Dago, presidenta de Pharmaceutical Care España

Desde la perspectiva de Dago, la forma en que los farmacéuticos se acercan a los pacientes oncológicos es muy importante, ya que son personas que acaban de recibir una mala noticia, están en estado de shock y viven este momento con gran incertidumbre. “Así pues, la comunicación con estos pacientes es de vital importancia, y el farmacéutico debe establecer con el paciente o su cuidador una comunicación efectiva y afectiva. El seguimiento de estos pacientes implica una relación continuada en el tiempo, y saber gestionar esta relación es vital para el éxito del tratamiento.

Los tratamientos del cáncer son, frecuentemente, tratamientos hospitalarios. El paciente no conoce el tratamiento que está recibiendo y, en ocasiones, su médico de AtenciónPrimaria tampoco. Sin embargo, como cualquier otro tratamiento tendrá sus contraindicaciones y reacciones adversas. El paciente con cáncer puede tener además otras enfermedades, lo que implica cambios en los tratamientos y en el control de esos problemas de salud, ya que ante cualquier nuevo síntoma habrá que indagar si es debido al cáncer o al tratamiento. Por tanto, uno de los principales problemas a los que se enfrenta el farmacéutico es saber que el paciente tiene cáncer y su tratamiento. Una vez que se conoce esta situación, debe estar atento a los cambios que se producen en la farmacoterapia del paciente, ya que muchos fármacos adyuvantes de la terapia anticancerígena se dispensan en la farmacia”.

Se trata de pacientes que, por lo general, utilizan varios tipos de fármacos: citostáticos, medicamentos para paliar los efectos adversos producidos por los anteriores, medicamentos para el dolor, y probablemente también tendrán tratamiento para otros problemas de salud como hipertensión, asma o diabetes. “El primer problema que se encuentra el farmacéutico comunitario en el abordaje integral de estos pacientes es la falta de información. A menudo se desconoce el tratamiento del paciente. Generalmente, la información a la que se tiene acceso es limitada y proviene del propio paciente o de un familiar, por tanto, en la mayoría de los casos, se trata de una información subjetiva y sesgada. Si tenemos la información adecuada, nuestras acciones irán encaminadas a evitar o paliar los efectos adversos, causa, entre otras, de la falta de adherencia en este tipo de pacientes, evitar interacciones que pueden disminuir la efectividad del tratamiento o potenciar sus efectos. En definitiva, el farmacéutico comunitario puede contribuir a que el tratamiento sea efectivo y seguro”.

Para la presidenta, el apoyo fundamental que puede realizar el farmacéutico al paciente oncológico y sus cuidadores es el de escuchar, acompañar, resolver las dudas y ayudar al paciente a tomar decisiones, siempre desde el respeto a su autonomía, pero proporcionándole la información. Generar un entorno de confianza en el que el paciente pueda realizar las demandas de información que precise, con la garantía de que se le va a responder con honestidad y que va a disponer de ayuda para asimilarla.

“Para que el farmacéutico pueda acompañar al paciente durante este proceso, se necesita que la información farmacoterapéutica que se origina en el hospital sea accesible para el farmacéutico comunitario a través de la receta electrónica”.

En el número 123 de la revista IMFarmacias.

TEXTO completo 👉  https://www.imfarmacias.es/revista/123/70/

y VÍDEO 👉 https://youtu.be/qtM-l-gtnHo